¿El seguro de vivienda cubre los daños causados por huracanes?
El pasado miércoles 28 de septiembre, Ian, un huracán de categoría 4 se abrió paso por las tierras de Florida dejando en su camino severos destrozos en toda la ciudad, en especial en viviendas y edificios.
Las fuertes ráfagas de viento y las lluvias torrenciales provocaron grandes inundaciones que ingresaron al interior de viviendas y vehículos, ocasionando daños irreparables, lo que llevó a muchas personas a cuestionarse si el seguro de vivienda cubre los daños causados por huracanes.
Los ciclones forman parte de la vida en Florida, por lo que cada año, al acercarse la fecha en que comienza su temporada (del 1 de junio al 30 de noviembre de cada año), es importante revisar las pólizas de seguros de vivienda para prepararse en caso de que afecte su propiedad.
Por este motivo es que, en la entrada de hoy, hablaremos todo lo que se debe saber sobre la cobertura de los daños causados en una vivienda tras el paso de un huracán. En este sentido, explicaremos cuáles son los daños que causa un huracán y cuál es la cobertura del seguro de vivienda contra estos ciclones.
Qué daños causan los huracanes
Conocer los daños que causan los huracanes es esencial para estar informados a la hora de contratar una póliza de seguros de vivienda. Para ello es importante remarcar que no todos los huracanes causan los mismos destrozos, ya que eso depende, en gran medida, de las velocidades que alcanzan sus vientos.
En líneas generales, las afectaciones que se encuentran asociadas a los huracanes son: vientos fuertes, lluvias torrenciales e inundaciones. De acuerdo con la categoría del ciclón, será la intensidad de destrucción.
Vientos fuertes, precipitaciones e inundaciones
Los vientos que se encuentran relacionados a los huracanes suelen ser devastadores, en especial cuando azotan directamente la ciudad. En base a la velocidad y a la fuerza destructiva con la que se desplaza, será la jerarquía del ciclón.
Así pues, si los vientos se encuentran entre las 120 y 150 millas/h, se considera un huracán de categoría 1, el cual puede provocar algunos daños materiales, pero no de gravedad. Cuando las ráfagas oscilan entre las 155 y 175 millas/h, se considera un ciclón de categoría 2 y, tanto puertas, ventanas y tejados corren algunos riesgos de roturas.
En el momento en que se registran vientos con una velocidad entre 180 y 210 millas/h, se está frente a un huracán de categoría 3, donde las estructuras de las viviendas corren peligro. Aquí las viviendas móviles pueden sufrir destrucción total.
Un huracán de categoría 4 se caracteriza por presentar ráfagas de viento pueden alcanzar las 250 millas/h y ocasionar daños mucho más graves, como inundaciones en el interior de las viviendas, caídas de árboles y desprendimiento de las tejas del techo. En esta categoría situamos al huracán Ian, donde la velocidad de sus ráfagas llegó a 250 millas/h y lo situaron a la orilla de la última categoría, la más catastrófica.
Para finalizar, cuando los vientos superan las 250 millas/h se los considera de categoría 5, la más destructiva y catastrófica, incluso la destrucción total de viviendas y edificios.
En el caso de las precipitaciones, un huracán puede generar más de 150 mm de lluvia al día, lo cual es suficiente para causar inundaciones, deslaves y derrumbes
Cobertura de seguros de vivienda contra huracanes
Ahora que ya se conocen los daños que puede causar un huracán de acuerdo con su categoría, es momento de hablar de la cobertura de seguros de vivienda contra los ciclones. Conocer esto de antemano es fundamental para estar tranquilos a la hora de contratar una póliza, sobre todo si se reside en zonas de huracanes.
Una cobertura estándar de vivienda provee un seguro para daños causados por estos fenómenos climáticos, pero hay que estar informados sobre las excepciones con los aspectos que no están dentro de la cobertura.
Seguro de vivienda
Como bien especificamos, los seguros de vivienda cubren ciertos gastos por los daños causados por los huracanes, pero hay ciertos ítems que no se encuentran dentro de la póliza y es preciso conocerlo de antemano.
Por lo general, estos contratos ofrecen protección económica para destrozos en la estructura de la vivienda, en los bienes personales, en casos de desplazamiento de tierra y en roturas de tejados y cobertizos.
Pero aquí hay que remarcar que la mayoría de estos seguros no cubren daños causados por las inundaciones y los desperfectos que eso conlleva. De este modo, si el seguro contratado no incluye este daño, lo mejor es ponerse en contacto con la compañía de seguros o con un profesional que lo aconseje. Con esta información que le brindamos en la entrada de hoy, podrá asesorarse con Mario Serralta, un abogado con una gran trayectoria y especialización en daños personales. Actualmente se encuentra en Florida, EE.UU. asistiendo a las personas afectadas por el paso del huracán Ian, siendo su portavoz frente a la compañía de seguros, velando por sus intereses para que puedan llegar a un acuerdo económico justo, con el mejor trato y en el menor tiempo posible.